Se termina el primer mes del año y muchos de nosotros todavía no hemos comenzado con algunos de los propósitos de año nuevo. Primero que si para después de reyes, después que si la primera semana no vale porque estamos volviendo a la normalidad poco a poco después de navidad y, con las excusas, siempre se nos termina enero. Sobre todo, hay uno de esos propósitos que siempre se nos suele retrasar que es perder peso.
Sí, existen tres míticos propósitos que son casi universales para la mayoría de la población: dejar de fumar, hacer ejercicio y perder peso. Estoy segura de que al menos uno de ellos estaba en tu lista este año.
Hace un par de semanas me puse a investigar un poquito sobre cómo empezar con todo el tema de la pérdida de grasa y existen mil remedios. Que si bebidas con limón, con jengibre o con aguacate, que si haciendo el pino puente todos los días durante dos horas o haciendo los doscientos mil abdominales y sentadillas de las Kardashian. Por supuesto, no me creí la mitad así que hoy os traemos tres mitos sobre cómo perder peso que deberías conocer para que lo que pierdas no sea el tiempo.
1. Cuánto más sudes, más grasa pierdes
Nada más lejos de la realidad. Pensar que por sudar vamos a eliminar más grasa es uno de los primero errores que cometemos cuando pensamos en elegir un deporte que nos ayude en la ardua tarea de la pérdida de peso. Existen muchísimas personas que, a pesar de hacer deportes de alta intensidad, no producen mucho sudor y est, se debe a que, la sudoración no no va directamente relacionada con la cantidad de grasa que se vaya a perder.
La sudoración no es más que una respuesta de nuestro cuerpo para regular su propia temperatura y eliminar toxinas de la piel. Es por esto por lo que cuando nos sometemos a ejercicios que nos provoquen una alta sudoración debemos reponer el agua que vamos perdiendo.
2. Primero adelgazar, después tonificar
Se trata de unos de los mitos que más se escucha “primero perderé peso y cuando tenga mi peso ideal empezaré a tonificar”. No, el músculo no se crea por encima de la grasa cuando empiezas a ejercitar la zona, y es muy recomedable tonificar a la vez que se pierde peso para evitar la flacidez.
Así mismo, para muchas personas como aquellas que tengan desajustes hormonales o diabetes es mucho más conveniente realizar actividades físicas de baja intensidad o pesas para que estas usen el azúcar como combustible. Lo ideal, por regla general, es una combinación de ejercicios de fuerza y de actividad aeróbica– el famoso cardio- en el entrenamiento.
3. «Quiero perder barriga»
Todas tenemos un punto flaco del que nos gustaría perder grasa: la barriga, las caderas, los glúteos o las piernas y nos obsesionamos con los ejercicios que implican el trabajo de esa zona en concreto: abdominales, sentadillas, y tablas de piernas. Sin embargo, aunque estos ejercicios sirven para tonificar las zonas no vamos a perder grasa en sí de esa zona, sino que lo iremos perdiendo progresivamente de partes repartidas por todo el cuerpo.
Algo que si nos puede ayudar a perder grasa de forma localizada es LPG Endermologie. Estos masajes drenantes se realizan con una maquinaria específica que cuenta con unos rodillos para estimular la parte de cuerpo se desea trabajar. Esto ayuda a eliminar la grasa localizada y a activar tu cuerpo para que elimine los líquidos retenidos. Así pues, te permite perder grandes cantidades de volumen que es lo que queremos cuando pensamos en adelgazar.
Las sesiones a realizar siempre dependerán de cada caso, así como, la asiduidad de las sesiones, pero por regla general tras 8 sesiones los resultado son notables. En Láserderma te valoramos y te vamos indicando cómo puede ser tu tratamiento.
Este tratamiento combinado con dieta y ejercicio muestra resultados muy competentes y que pueden ser un empujón para llevar a cabo tu propósito de año nuevo de una vez por todas. Así que ya sabes, no te dejes engañar por los mitos, come sano, haz ejercicio y mímate.